Una mirada al panorama global de las TIC evidencia el acelerado crecimiento de Startups en el sector EdTec (Educación y Tecnología) que ha generado más de tres mil puestos de trabajo fijos en Latinoamérica, según el reporte de Bloomberg. Además, ha facilitado el acceso a contenidos académicos que permiten la introducción o actualización en habilidades digitales como programación, desarrollo web y analítica de datos, entre otros temas, relevantes y muy apreciados en el mercado laboral.
En Colombia, “se han venido gestando procesos de digitalización en todas las industrias y se han consolidado a la luz de tecnologías emergentes que requieren, como base fundamental, de un capital humano cada vez más especializado en las TIC”, asegura Gerardo González, Máster en Innovación Tecnológica y gerente de Digital Business en Sonda Colombia, quien además expresa ser testigo de la escasez de profesionales orientados a tecnologías transformacionales en el país.
Las cifras en Santander en materia de adopción de TIC son positivas, pues la región ha sido líder en el último año, según la medición del Consejo Privado de Competitividad, además de ser el sexto departamento más innovador del país. Esto ha permitido que la región abandere iniciativas que favorecen la adopción de tecnología en todos los sectores económicos y mejore los índices de empleabilidad.
Esto explicaría que en el 2021 la reactivación económica dejó como éxito, según el Dane, una tasa de desempleo del 12,4%, convirtiendo a Bucaramanga en la tercera capital del país con menor desempleo. Actividades profesionales, científicas, técnicas y de servicios administrativos, fueron jalonadoras por excelencia de este indicador.
“Sin duda, las TIC juegan un papel protagónico para minimizar los impactos que trajo la pandemia posibilitando el acceso a la educación y de manera enfática en el sostenimiento de los empleos, es una obligación involucrar en todos los sectores tecnología e innovación, más aún desde la academia se debe apostar por la formación de profesionales cualificados en tecnologías emergentes”, afirma Gladys Lizarazo Salcedo, vicerrectora de Posgrados de la Universidad de Santander, UDES.
El estado actual de las TIC vislumbra un abanico de oportunidades para que los jóvenes logren ascender profesionalmente, siendo determinante el dominio de competencias relacionadas con la inteligencia emocional y social, pensamiento crítico, creatividad, orientación al servicio, resiliencia y capacidad para trabajo colaborativo.
De acuerdo con el Foro Económico Mundial, para 2025 esas competencias serán un requisito básico en la vinculación de talento, adicionando otras como persuasión, negociación, resolución de problemas complejos y manejo de experiencia de usuario.
Hoy las TIC se han convertido en un requisito de trabajo y, seguramente, el futuro demandará tener conocimiento en competencias digitales. “El presente mercado laboral requiere profesionales con competencias técnicas y blandas, desde la disciplina de formación de los graduados de cada programa de posgrado es necesario que dominen las TIC, en este nivel se requiere habilidades como analítica de datos, con el fin de ser capaz de identificar información destacable y generar nuevo conocimiento en las organizaciones para poder tomar buenas decisiones y ser más competitivos”, expresa Sandra Sanguino, directora General de Posgrados UNAB.
Los profesionales se enfrentan a un entorno dinámico y es urgente entrenar a las personas en competencias digitales, además de reentrenarlas en sus roles actuales, “la disrupción tecnológica se traduce en cambios importantes en las ocupaciones tal como las conocemos hoy en día, debido a los procesos de automatización, robotización y uso de inteligencia artificial, por eso, será clave fortalecer las competencias técnicas en demanda como programación, ciberseguridad, analítica de datos, desarrollo de software y computación en la nube”, explica Gerardo González, gerente de Digital Business en Sonda Colombia.
Se suman las habilidades blandas como aspecto determinante en el ascenso laboral, las personas con alto grado de inteligencia emocional y social marcan la diferencia en la escogencia de alguien para una promoción en un cargo de mayor responsabilidad. “Cada vez más estamos inmersos en un constante cambio en las situaciones del día a día, procesos caóticos o que requieren tomar decisiones de manera rápida y con poca información, es en este ambiente donde las habilidades de relacionamiento, interacción con los otros, manejo de la ansiedad y el estrés pueden ser decisivos”, enfatiza el vocero de Sonda Colombia.
Los conocimientos en TIC deben ser transversales a todas las profesiones. Cada vez más se viven procesos continuos de digitalización, la base de uso, control y monitorización de la tecnología son sobresalientes en el momento de seleccionar personas en los diferentes sectores de la industria.
Elaborado por: Jennifer N. Argüello